Saludos UNEFISTAS de la Sección 402M
A continuación se presenta una lectura sobre las bases biológicas de la conducta: Sistema Nervioso Central, el Sistema Periférico y el Sistema Endocrino. Luego de la lectura, realiza una intervención en pareja sobre la influencia de estos sistemas en la conducta de los seres humanos, es decir explica ¿cómo influyen estos sistemas en nuestro comportamiento?
El sistema nervioso
“Es un sistema muy complejo, formado por neuronas que relaciona al hombre con el exterior, regula y controla las funciones del organismo, es sede de la memoria, la inteligencia y la voluntad”.
El Sistema Nervioso del cuerpo humano se encarga de enviar, recibir y procesar los impulsos nerviosos. El funcionamiento de todos los músculos y órganos del cuerpo depende de estos impulsos.
Tres sistemas trabajan conjuntamente para llevar a cabo la misión del sistema nervioso: el central, el periférico y el autónomo:
El sistema nervioso central es el encargado de emitir impulsos nerviosos y analizar los datos sensoriales, e incluye el encéfalo y la médula espinal. Está formado por un centro nervioso muy voluminoso, situado en la cabeza, el encéfalo y por un cordón nervioso, la médula espinal, del grueso de un dedo, que recorre el cuerpo longitudinalmente. Se encuentra recubierto por tres membranas: la piamadre, que se une a la masa nerviosa y está muy vascularizada; la aracnoides y la duramadre. Entre estas dos últimas, hay un líquido especial, el líquido cefalorraquídeo. Estas tres envueltas, junto con los huesos del cráneo y las vértebras, sirven de protección al delicado tejido nervioso. La duramadre está soldada al cráneo que hace de estuche para el encéfalo y las vértebras en el interior del canal neural de éstas, por donde discurre la médula espinal.
Todo este sistema proviene de un primitivo tubo neural en el embrión y por ello presenta en su interior unas cavidades muy reducidas ya. En el interior de la médula lleva un estrecho canal, llamado epéndimo, y el encéfalo presenta cuatro espacios internos llamados ventrículos. Uno de ellos se comunica con la aracnoides, penetrando en él y en todas estas oquedades el líquido cefalorraquídeo.
El sistema nervioso periférico tiene la misión de transportar los impulsos nerviosos a y desde las numerosas estructuras del cuerpo, e incluye numerosos nervios craneoespinales que se
bifurcan desde el encéfalo y desde la médula espinal.
El sistema nervioso periférico o SNP, sistema nervioso formado por nervios y neuronas que residen o extienden fuera del sistema nervioso central hacia los miembros y órganos. La diferencia con el sistema nervioso central está en que el sistema nervioso periférico no está protegido por huesos o por barrera hematoencefálica, permitiendo la exposición a toxinas y a daños mecánicos.
El SNP está compuesto por:
- Sistema nervioso somático: Activa todas las funciones orgánicas (es activo).
- Sistema nervioso autónomo o vegetativo: Protege y modera el gasto de energía. Está formado por miles de millones de largas neuronas, muchas agrupadas en nervio. Sirve para transmitir impulsos nerviosos entre el S.N.C y otras áreas del cuerpo.
El sistema nervioso autónomo esta formado por los sistemas simpático y parasimpático, se
encarga de regular y coordinar las funciones de las partes vitales del cuerpo, es el responsable de los aspectos de autocontrol (funciones involuntarias) del organismo, aunque está bajo el control de la corteza cerebral, el hipotálamo y la médula oblongata.
Trabajando en conjunto con el sistema nervioso central, el sistema nervioso autónomo se divide en dos subsistemas que regulan las funciones del organismo como los movimientos involuntarios de los músculos lisos y el movimiento del corazón. Estos dos subsistemas se llaman el sistema nervioso simpático y el sistema nervioso parasimpático, cuyas funciones son opuestas, y así producen un equilibrio entre las funciones corporales.
El sistema nervioso simpático produce respuestas de defensa y de lucha ante un estímulo o el estrés, como aumentar el ritmo del corazón, la producción de saliva y la sudoración. El sistema parasimpático contrarresta estos efectos haciendo más lento el ritmo del corazón, dilatando los vasos sanguíneos y relajando las fibras de los músculos lisos involuntarios. El sistema nervioso autónomo por dos partes, las divisiones Simpáticas y Parasimpáticas.
Visto de manera individual, el sistema nervioso simpático, también denominado sistema toracolumbar, se compone de una serie de nervios que salen de la médula espinal entre la primera vértebra torácica y la segunda vértebra lumbar. Estas fibras nerviosas se unen en un gran tronco de fibras, llamado el tronco simpático a cada lado de la médula espinal. A lo largo del tronco simpático se forman grupos de fibras nerviosas llamados ganglios. Desde estos ganglios, un gran número de fibras nerviosas se extiende hacia los tejidos del organismo. Muchos de estos nervios forman otros ganglios adicionales, como los ganglios celíacos y los ganglios mesentéricos.
Los nervios del sistema nervioso son los responsables de la contracción de las fibras de músculo liso de las vísceras y de los vasos sanguíneos, aumentan el ritmo cardíaco y dilatan los bronquios para que admitan más aire.
EL sistema nervioso parasimpático esta compuesto por ganglios en el mesencéfalo, en la médula oblongata y en la región sacra. Los dos primeros (los ganglios craneales de sistema nervioso parasimpático) envían impulsos nerviosos al nervio facial, el oculomotor, el glosofaríngeo y el nervio vago. La porción sacra de los nervios parasimpáticos se originan en la segunda, tercera y cuarta vértebra e inerva la vejiga, el colon distal, el recto y los genitales. Los nervios del sistema nervioso parasimpático son responsables de conservar el equilibrio con los impulsos del sistema simpático.
Sistema Endocrino
Todos los órganos del Sistema Endocrino son glándulas (estructuras especializadas que contienen células que secretan fluidos y otras sustancias directamente a la sangre a través de un conducto). Son diferentes del resto de las glándulas porque liberan sustancias químicas, conocidas como hormonas, en la circulación sanguínea general. Otras glándulas descargan sus secreciones en conductos hacia un lugar concreto. Estas glándulas se denominan exocrinas. Los órganos
del sistema endocrino se encuentran situadas en lugares del cuerpo muy separados: en la cavidad craneal, en el cuello, en la cavidad torácica, en la cavidad abdominal, en la cavidad pélvica y fuera de las cavidades del cuerpo.
Las hormonas que liberan son muy importantes para las funciones corporales. Regulan instintos básicos y emociones, como los impulsos sexuales, violencia, ira, miedo, alegría y tristeza. También estimulan el crecimiento y la identidad sexual, controlan la temperatura corporal, ayudan en la reparación de tejidos dañados y ayudan a generar energía. La pituitaria (o hipófisis) es una pequeña glándula no mayor que un guisante, localizada en la base del cerebro en una pequeña depresión del hueso esfenoidal denominada la silla turca. Es controlada por el hipotálamo al cual está anclada y a veces se denomina como glándula principal o dominante, ya que su función es coordinar el sistema nervioso y endocrino.
Algunas de sus hormonas estimulan a otras glándulas endocrinas que producen sus propias hormonas esta pequeña glándula consta realmente de dos glándulas: la glándula pituitaria anterior (o adenohipófisis) y la posterior (o neurohipófisis). Esta glándula produce numerosas hormonas una de ellas regula la retención de agua por los riñones otra produce la contracción del útero durante el parto, estimulándose entonces la producción de leche en las glándulas mamarias. Una de las hormonas más importante es la hormona del crecimiento (GH), esta hormona controla el crecimiento regulando la cantidad de nutrientes recibidos por las células. La hormona del crecimiento también colabora con la insulina en el control del nivel de azúcar en sangre. Se conoce como la glándula maestra, ya que estimula la acción de las otras glándulas endocrinas.